Mencionado por Bernal Díaz del Castillo como uno de los puntos donde pasaron los españoles en su camino a Tlaxcala y Tenochtitlan, Xalapa siempre fue un lugar importante, incluso antes de convertirse en capital del estado en el siglo XIX. Varias veces heroico por la resistencia contra los norteamericanos y los franceses, primer puerto de altura en el país durante la Colonia y capital de la República en diversas ocasiones; acosado por piratas que obligaron a fortificarlo y construir el Baluarte de Santiago, hoy museo, y San Juan de Ulúa, que después fue cárcel y ahora museo; pueblo bullicioso por excelencia donde el carnaval parece durar todo el año, Veracruz se pinta solo, al son del huapango y el jarabe que la jarana y el arpa van marcando, y al ritmo del zapateado con que las penas son despedazadas. Recomendamos visitar el muelle, los portales, Boca del Río, el Acuario, las playas Villa del Mar y Mocambo, los centros nocturnos, los bares, las discotecas, el nuevo y el viejo café La Parroquia y algunos templos como la iglesia parroquial. Entre Xalapa y Veracruz apenas hay 104 km por la carretera 140.


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