«Creo que el ‘Brexit’ terminará siendo muy positivo», anticipa Trump. «¿El hecho de que la libra esterlina haya caído? Bien. Es porque el negocio es increíble en muchas partes del Reino Unido», asegura.

El presidente electo predice que la Unión Europea seguirá rompiéndose a medida que los países europeos reaccionen ante una afluencia de refugiados que amenaza la identidad de las distintas naciones.
«La gente, los países, desean su propia identidad. El Reino Unido quería su propia identidad», advierte Trump, añadiendo que si los países europeos no hubieran sido «obligados» a acoger refugiados el ‘Brexit’ no habría ocurrido. «Mantenerla unida no será tan fácil como mucha gente piensa», vaticina.

Trump se muestra preocupado ante la idea de que la OTAN no se haya reformado para hacer frente a la amenaza del terrorismo islamista. «Hace mucho tiempo dije que la OTAN tenía problemas. El primero, que está obsoleta porque fue diseñada hace muchos años. La segunda, que los países no están pagando lo que deberían (…) lo cual creo que es muy injusto para EE.UU.», explica.

El presidente electo de EE.UU. asegura que trabajará «muy duro» para lograr un acuerdo comercial con el Reino Unido «rápido» y en los «mejores términos» para ambas partes.

Trump sostiene que la canciller alemana Angela Merkel cometió un «error catastrófico» al dar la bienvenida a un número ilimitado de refugiados sirios, a los cuales se refiere como «todos esos ilegales». Asimismo, sugiere que el ataque del mercado de Navidad del pasado diciembre en Berlín fue un efecto de las políticas de la canciller.

Trump afirma que considerará la posibilidad de revisar las sanciones estadounidenses contra Rusia si el presidente Vladímir Putin está dispuesto a poner de su parte. «Por un lado, creo que las armas nucleares deberían reducirse sustancialmente», apunta Trump, quien añade que cree «que puede suceder algo de lo que mucha gente se beneficiará».

Trump ha criticado al presidente Barack Obama por no tomar medidas contra el jefe del Estado sirio Bashar al Assad y por permitir que Rusia tome el control del curso de la guerra civil. El presidente electo sostiene que «nada pasó» cuando EE.UU. «tuvo la oportunidad de hacer algo».

El nuevo inquilino de la Casa Blanca evita revelar detalles de su política sobre Irán: «Simplemente no quiero jugar mis cartas». Sin embargo, afirma no estar «contento» con el acuerdo al que llegó Barack Obama con Irán sobre las armas nucleares, el cual describe como «uno de los peores acuerdos jamás alcanzados».

Trump afirma que Christopher Steele, el exagente del MI6 que investigó los supuestos vínculos de Trump con el Kremlin, es «alguien a quien no hay que perder de vista» porque todo lo que «inventó» sobre él «es falso».
«No quiero ni siquiera estrecharle la mano a la gente ahora que oigo hablar de estas cosas», admite el magnate.