Hablar de M. Night Shyamalan es un ejercicio extraño; si bien muchos de los amantes de sus películas pueden hablar de él como un director fuera de serie, sus detractores, por el contrario, escudan sus argumentos en la forma tan surreal en la cual sus cintas pierden todo esquema. Pero más allá de ser un director polémico por muchas razones, hoy por hoy, Shyamalan se ha caracterizado por ser un director que toma todos los riesgos en cada una de sus películas.

Cuando el director y guionista comenzó su carrera con Stuart Little, nadie pensaba que el giro que daría, sentaría precedente en el mundo del thriller extraordinario. Desde Sexto Sentido, el director se ha encargado de crear películas donde, desde el asiento, no encuentran una solución plausible hasta el último minuto del film.

Con Split, el director llevó a otro nivel el thriller psicológico que Hitchock retrató a la perfección. Las múltiples personalidades y un final que eriza el cabello son la amalgama perfecta para una historia aislada que hoy se encuentran en un momento deseado por muchos de los fans del creador.

Glass, no solo será una secuela de Split, sino que para sorpresa de muchos será la tercera cinta de una trilogía no esperada por nadie. La cinta traerá a de nuevo a pantalla a dos de los personajes de Unbreakable David Dunn (Bruce Willis) y Elija Price (Samuel L. Jackson) como una trilogía perfecta desde el punto de vista retorcido del director donde, al parecer, todos los personajes estarán ligados de una forma que solo el director puede pensar.

Glass se estrenará en enero del 2019