No se habla frecuentemente de la salud sexual femenina. A veces porque parece incómodo, o se cree que es inapropiado, o porque hay poca información del tema. Pero la salud sexual es muy importante y es un tema que no debe de evitarse, al contrario, debe ser una prioridad cuando se trata del cuidado de nuestro cuerpo y de la salud en general.

Hay cientos de padecimientos que no son muy conocidos por las mujeres, pero que son más frecuentes de lo que parecen, y que ni siquiera se mencionan porque son tabú en la sociedad, y la vulvodinia es uno de ellos.

Se puede presentar como dolor, ardor o irritación y puede ser tan molesto que actividades tan cotidianas como sentarse o tener sexo son incómodas, o incluso hasta impensables.

La ubicación, constancia y severidad del dolor varían entre las mujeres. De acuerdo con la National Vulvodynia Association, la vulvodinia puede ser localizada o generalizada, y no hay una descripción precisa sobre qué sienten las mujeres cuando la padecen, pues algunas presentan una sensación de «quemadura», mientras que otras lo describen como un dolor punzante.