Chile vive un momento histórico en su historia. Con una aprobación del 78.2% de los votos la ciudadanía se ha pronunciado a favor de crear una nueva constitución y desechará la redactada por el régimen de Augusto Pinochet.
El plebiscito, que planteaba dos preguntas: ”¿Quiere usted una Nueva Constitución?” y ”¿Qué tipo de órgano debiera redactar la Nueva Constitución?”, ha contado con una participación que ha superado los siete millones de votantes (un 50,6%), según datos preliminares de la comisión electoral.
Los chilenos no solo han dicho ‘sí’ a una nueva Carta Magna, sino que también han escogido la vía para elaborarla: una ‘Convención Constituyente’ -que estará formada por 155 ciudadanos elegidos en su totalidad por voto popular- y que ha contado con el 79% de papeletas a favor, frente a la ‘Convención Mixta’- que proponía una mezcla de miembros elegidos popularmente y parlamentarios en ejercicio- y que fue apoyada inicialmente por los partidos de la derecha.
El plebiscito ha sido celebrado en pleno clima de tensión y de crispación social y económica -más allá de la pandemia-, que tuvo su punto álgido entre octubre de 2019 y febrero de 2020, cuando las manifestaciones y protestas derivaron en algunas zonas en violentos disturbios que dejaron una treintena de fallecidos, más de 34.000 heridos y alrededor de 8.800 personas detenidas, poniendo en el punto de mira la labor policial.
Ahora, el nuevo texto pretende dar una respuesta a los reclamos sociales que que han sido el detonante para que la consulta se llevase a cabo.
“Hemos escuchado el mensaje del pueblo de Chile y eso implica empezar este proceso constituyente con la fuerza que implica la defensa de nuestras ideas”, ha enfatizado el senador de Renovación Nacional (RN), Francisco Chahuán.
El triunfo del ‘sí’ se ha celebrado en las calles de todo el país. En la capital, Santiago, cientos de manifestantes se han congregado con banderas para celebrar una jornada ya histórica.
Fuente: The Huffpost
Permanencias Voluntarias 
Deja un comentario