La Reforma Electoral al parecer se quedará sin la votación para su aprobación.

Líderes parlamentarios del PAN y el PRI en la Cámara de Diputados desmintieron el optimismo expresado por el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, en San Lázaro, y aseguraron que “no se negocia ninguna reforma electoral que intente tocar ni debilitar al INE”.

Luego de que el pasado viernes el funcionario insistió en su visita al Palacio Legislativo en que “va haber reforma electoral”, “la reforma electoral va”, “ya hay un grupo del PRI y del PAN negociando”, “siempre hay márgenes para acordar, para consensar”, los coordinadores panista, Jorge Romero, y el priista, Rubén Moreira, reiteraron que no avalarán la iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Jorge Romero refrendó: “Sugiero al secretario que no ponga el desorden. No hay ‘algunos panistas’ negociando nada. El PAN está formalmente en la mesa de trabajo sobre la reforma electoral para discutir las más de 100 iniciativas”.

El priista Rubén Moreira criticó a Adán Augusto López de querer “tender una trampa” y “confundir con discursos políticos falsos”. “Los diputados del PRI no están negociando nada sobre la reforma electoral y votaremos en contra de la que ha presentado el Ejecutivo, con la certeza de que no vamos a tocar al INE, a los tribunales electorales ni a los Organismos Públicos Locales”, remarcó.

Comentó que “hay versiones de todo tipo, se crean discursos falsos y hay que tener cuidado de no caer en la trampa”. Informó que el grupo de trabajo ni siquiera se ha reunido y mucho menos se ha informado a los líderes parlamentarios que haya una propuesta de consenso.

También, el diputado y dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, aseguró que “no hay negociaciones con el gobierno para una reforma del Ejecutivo”, y sostuvo que “el PRI no apoyará jamás ninguna reforma que atente contra el INE o contra el Tribunal Electoral”.

Sin embargo, en la dirigencia del PAN no hay confianza en el PRI, y el líder panista, Marko Cortés, advirtió: “Ya veremos cómo votan aquellos que se dicen de oposición”.

Fuente: El Financiero