La presidencia de la unión americana se encuentra preocupada por las repercusiones de un conflicto armado.
Estados Unidos acusó el viernes a Rusia de preparar una operación «pretexto» para justificar una invasión de Ucrania, que firmará un acuerdo de cooperación cibernética con la OTAN tras sufrir un ciberataque que dejó fuera de servicio varios sitios web del gobierno.
Después de una semana de conversaciones estériles entre Estados Unidos y sus aliados con Moscú, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, acusó a Rusia de preparar una operación de sabotaje que podría servir de «pretexto para una invasión».
Según la acusación estadounidense, Moscú habría «preposicionado un grupo de agentes», «entrenados en la guerrilla urbana y el uso de explosivoS», en el este de Ucrania para llevar a cabo ataques de falsa bandera contra separatistas prorrusos.
El Kremlin rechazó las acusaciones y declaró que eran infundadas. «No hay nada que las confirme», reaccionó su portavoz Dmitri Peskov, citado por la agencia TASS.
Este cruce de declaraciones se produjo en la misma jornada en la que un potente ciberataque dejó fuera de servicio las webs de varios ministerios ucranianos como el de Relaciones Exteriores y el de Situaciones de Emergencia.
La acción no ha sido reivindicada, pero el portavoz de la diplomacia ucraniana, Oleg Nikolenko, aseguró que disponen de «indicios preliminares» de que «podría ser obra de grupos piratas informáticos asociados a los servicios secretos rusos».
Las autoridades ucranianas aseguraron que no se habían producido daños importantes y que gran parte de los recursos habían sido restablecidos.
Tras el ataque, la alianza militar transatlántica anunció un acuerdo que se firmará «en los próximos días» y que incluye «el acceso de Ucrania a la plataforma de intercambio de información sobre malware de la OTAN», expresó su secretario general, Jens Stoltenberg.
La Unión Europea también prometió movilizar «todos los recursos» para ayudar a su aliado después del ciberataque.
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, consideró el viernes prematuro «señalar con el dedo a alguien», pero agregó que se podía imaginar quien estaba detrás del ataque.
El portavoz de la diplomacia ucraniana calificó el ciberataque de «masivo» y antes de que su sitio web quedara bloqueado, los autores publicaron un mensaje amenazador en su página de inicio en ucraniano, ruso y polaco.
No obstante, los servicios secretos ucranianos (SBU) informaron que no se filtraron datos personales. También señalaron que 70 webs se vieron afectadas.
El ciberataque tiene lugar en un contexto de crecientes tensiones con Rusia, a la cual Kiev y sus aliados acusan de planificar una nueva invasión de Ucrania.
En este contexto, el Ministerio ruso de Defensa publicó el viernes imágenes de maniobras militares con 2.500 soldados y un centenar de tanques a unos 50 km de la frontera ucraniana.
El viernes sin embargo, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, propuso una reunión a tres bandas, posiblemente virtual, con sus homólogos de Estados Unidos y de Rusia para frenar la crisis.
Fuente: CNN
Deja una respuesta